
El mundo cambio desde que te deje partir,
las estrellas solo irradian obscuridad
las noches parecen no tener fin,
el recuerdo es el compañero de mi soledad.
Hermoso era a cada instante reflejarme en ti,
cada momento era un suspiro sin final.
Inmenso fue el amor que tatuaste en mi,
mojando mi alma hasta la eternidad.
Y aun recuerdo todo tu mirar,
besos y caricias rondan la memoria.
Una eternidad podre soñar
noches sin fin cerca de la gloria.
Esclavo soy de ti hasta el fin del mundo,
hundido en tu esencia y espíritu,
Y sera imposible no amarte cada segundo.
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